viernes, 26 de diciembre de 2008

Los Rieles del Mar; Bahia Drake


x Mario Aguilar (1)


Los Rieles del mar

A los detenidos-desaparecidos que yacen en el mar

Fue en San Antonio que te esperé
Sin saber si tú serías o yo no
Pues solo sabía que algunos rieles serían
De entre todo y nunca más.

En una mañana de vapor y olas
Las gaviotas contemplaron una balsa
Que llevaba los excavadores a proa
Entre ellos un juez y también un poeta.

Y a medida que la bruma se disipaba
Las olas se separaban violentando los moluscos
Y diciendo “vamos a pescar rieles”
Los rieles del pasado y del presente.

Porque entre los abismos fantasmales del mar
El mar como sarcófago y tumba
Se hallaban los rieles del tren
Que ataban los cuerpos de Marta y de Marcela.

Muchos años atrás ellas fueron detenidas
Torturadas y vejadas no en el mar sino que en la tierra
Y sus cuerpos arrojados a ese mar celeste
Con rieles amarrados para que el mar se los tragara.

Y ahora después de treinta años siento el hastío
Y siento la añoranza de los árboles marinos
Cuando el mar se cimbra en sus hierros
Y los rieles transportan la memoria del mar a la montaña.

Rieles del mar como mariscos listeria nos
Y como corazones partidos de la almeja y el huiro
Llevan al juez y al poeta a estremecerse
Pues el caldo del mar trajo la memoria y el pasado.

¡Mar del litoral!
Guardabas secretos de la vida y la muerte
Pero no eres pánico ni hostigamiento
Aunque escupas rieles y botellas
Que contienen el pasado, la historia y la memoria.

Rieles del mar y mar de rieles
Escapen a la memoria y el pasado
Para que podamos saber y oír
Al mar de los rieles y al mar de la memoria.


Bahía Drake

En La Serena con Tamara

Bruma marina acongojada
Piratas ingleses y mujeres
En una bahía milenaria
En que escribí “tú y yo”.

Y ahí donde el ensueño del pasado
Y la añoranza del hogar y patria
De Francis Drake y sus compañeros
Te encontré silbando “Let it be!”.

Olas ruidosas y susurrantes
Caminando en la arena de la sangre
Donde recordé a Marta y Carrizales
Recordé una infancia feliz e interrumpida.

Ahí donde una medusa salió de las olas
Y encantó a la pulga de mar y los peces
Encontré y sentí como hace treinta años
La felicidad del tú y del yo.



(1)Mario Aguilar Benítez,  poeta y escritor chileno.

En su poesía Mario Aguilar ha tratado de experimentar con las características materialistas y estéticas de la historia, la tortura y el amor iniciando un diálogo entre el poeta como actor y el espacio natural y material como interlocutor. Autor de 18 libros sus escritos más recientes se han relacionado con la historia y la memoria de la Villa Grimaldi, hoy Parque por la Paz, lugar de detención y tortura durante la dictadura de Augusto Pinochet.

Personalmente como editor, celebro con mucha alegría y emoción que Mario esté aquí, en este espacio, como poeta, testigo y protagonista de una época macabra de nuestra historia. Celebro su presencia como un triunfo de la vida sobre la muerte y el horror, como un acto heroico de resistencia y amor, gracias Mario por existir y estar junto a nosotros, nuestras ideas no mueren gracias a seres humanos como tú.

Ramillete de Niños


x Zullete Andrade González (1)


REMEN, REMEN

Ahí van remando mis niños pescadores
llevando el ritmo en sus brazos
uno tras otro introducen el remo
quieren ganarle siempre al viento

Cual es la prisa que tienen
que parten en dos al lago
quieren al agua beberse
tranquilos, que no se irá de su lado

todos se necesitan
agua, remo, lancha, joven
para volar por el agua
y sentir el viento en la frente

remen , remen por sus sueños
alcáncelos ya que pueden
hacerlo con sus brazos fuertes
y el corazón de por medio.


NIÑOS DE CARTÓN

Existen pequeños hechos de porcelana
delicados, con la blancura fría
que fácilmente en dos se partirían
porque están huecos como la nada.

Pero están mis niños de cartón
simples y desprotegidos
que se encuentran en el olvido
y mojado su corazón.

Viviendo en palacios de papel
y barquitos de periódico
esperando que traigan al heroico
marinero con su oropel.

Mientras que otros como ocio
traen triciclo, carritos
comen dulces, chocolates
hasta los dedos chuparse

Mientras que otros sueñan
ellos no quieren despertar
parece que nunca se quejan

Dichosos puede que sean
tal vez si les guste soñar
con una vida más plena

Mientras que no dejo de pensar
en mis niños de cartón.


¿DE QUÉ COLOR SON LOS NIÑOS?

¿De qué color son los niños?
me preguntó una vez el mío
le contesté que no tienen color
porque son niños, no crayones

pero me volvió a preguntar
porque hay negros, blancos
de piel roja y amarilla
con cabellos negros de noche
o de color de día

con ojos cual el mar
o cafés como la tierra
verdes como la hierba
o grises como el metal

quería saber que tipo de niño es
pero solamente le respondí
que no importa el color de la piel
sino el interior que hay en ti.

Que no es color lo que ves
sino una fachada que tenemos
no son colores mi pequeño
no son niños arcoiris.

Todos son iguales mi niño
nunca pienses en el color
debido a que el amor
no distingue el colorido.

Y se fue algo tranquilo
pero me quede pensando
si eso pensaran lo mismo
mis colegas adultos
que no hay color en los niños
sino amor pintado en sus rostros.


(1) Zullette Andrade González, 37 años, poeta mexicana, es Bióloga y Maestra de preparatoria. Ella es lectora de nuestro blog y nos mandó esto delicados poema, de los niños, sus niños y el mar. Se lo agradecemos profundamente y estamos felices de poder publicarlos en este espacio, que a pesar de sus lentos avances no muere, gracias a personas como Zullette.